lunes, 21 de abril de 2008

La historia de Mariano, parte 1











Llegó a su casa de acogida el 5 de enero, estaba muy asustado y apenas
podía caminar. A su corta edad de un mes ya lo habían tirado de casa y
abandonado a su suerte en un contenedor. La persona que lo encontró no dudó en
cogerlo y llevarlo a Asoka. Cuando Arabela lo vio se ofreció para
llevarlo a casa (en acogida), ya que era muy pequeño para dejarlo con los perros adultos.
Además tenía una luxación de rodilla que le impedía caminar.
La semana siguiente le llevaron al veterinario para hacerle unas pruebas y determinar si era grave su lesión. El veterinario les contó que los huesos de sus patas traseras no podían crecer con normalidad. Debían esperar para ver su evolución. O se le practicaba una operación de cadera o se sacrificaba, ya que sus patas no podrían soportar el peso de su cuerpo. Todos estábamos muy preocupados y nos esperábamos lo peor...




2 comentarios:

Anónimo dijo...

Aunque me dolió mucho separarme de Mariano, soy consciente de que le he salvado la vida dándole cariño. Ellos no piden otra cosa, respetalos son seres vivos que sienten la alegría y la tristeza como tú y yo. Vamos a darles una oportunidad adoptando, no comprando.

No sin mis gatos dijo...

Todos se merecen tener un hogar donde les quieran y respeten. Espero ver fotos de Mariano en su nuevo hogar y lo feliz que está.